¿Qué os parece tener una vista de Graus desde el cielo?
Os proponemos dejar la visita del casco antiguo para después de la excursión. Así nos sentará mejor el descanso en la Plaza Mayor.
Parece que nos va a costar subir, pero alcanzar la Basílica de la Virgen de la Peña y el mirador de la Peña del Morral no nos llevará más de media hora. Una escalera nos facilita las cosas y el esfuerzo tiene recompensa porque en un día soleado las vistas encogen el corazón.
El conjunto que forma el santuario de la Virgen de la Peña, compuesto por la iglesia, la capilla de San Juan de Letrán y el claustro, es precioso. A partir de aquí la subida se hace más pronunciada. La súbida es cómoda, pero es subida… mejor no ir con tacones. No tiene pérdida y no hay riesgo, pero en algunos tramos quizás debemos ir de la mano de los más pequeños.
Una vez en lo alto, junto a la estatua del Corazón de Jesús, podremos reconocer todos los pueblos y montañas que nos rodean indicados en el panel interpretativo. Nos hacemos unas fotos y regresamos al pueblo.
Vamos a pasear por las calles del Barrichós, cuyo significado es barrio de abajo, y llegar hasta el Puente de Abajo, sobre las aguas del río Ésera. Y también visitamos el mural de la biodiversidad de Espacio Pirineos, con una representación de la flora y la fauna del Pirineo. ¡WOW!
Dejamos para el final el rincón más bonito de Graus, la Plaza Mayor. ¿Hay una plaza más bonita y con tanto encanto como esta? Los porches y las pinturas que decoran las fachadas llaman mucho la atención. ¡Y nocturna también es muy bonita! Este es el mejor punto y final para recorrer Graus.